Femme Fatale 13: Pippa Middleton

Todas conocéis a Kate Middleton, la prometida del Príncipe Guillermo de Inglaterra. Una chica dulce, tímida, recatada...nada que ver con su hermana pequeña, Pippa, quien hoy será la protagonista de Femme Fatale.

Pippa nació en 1983 en Berkshire, en el seno de una familia de clase media británica, su madre era azafata de vuelo y su padre piloto, tiene dos hermanos más, Kate y James. Desde la niñez destacó por su ambición y desparpajo, eclipsando por completo a su hermana mayor en numerosas ocasiones.

La suerte quiso que sus padres decidiesen cambiar de trabajo y montasen una empresa de fiestas infantiles, que tuvo un gran éxito, tanto que ganaron una buena fortuna, gracias a ello, pudieron darles a sus hijos la educación que siempre desearon.

Pippa era una chica que escuchaba con suma atención los consejos de su madre, quien vivía obsesionada con casar a sus hijas con aristócratas o nobles. Para ello desde muy pequeñas intentó que sus hijas se codeasen con las clases altas británicas, inscribiéndolas para ello en los colegios más elitistas del país.

Con el tiempo las hermanas Middleton, se integran sin problema en la alta sociedad, especialmente Pippa.

De ella comentan que era una chica muy interesada, ponía su mejor sonrisa y su simpatía a disposición de tan sólo las personas más importantes del lugar, no perdía el tiempo hablando o creando amistades con "plebeyos".

Se le conocen pocas parejas, eso sí, siempre con aristócratas de edades similares a las de ella. Es una chica con las ideas muy claras, con una intensa vida social.

Es de hecho esta vida social, uno de los consejos que le dio su madre, que se dejase ver en todas las fiestas y eventos importantes, donde pudiesen conocer a personas relevantes, crear amistades con los más poderosos y quien sabe si quizás conocer a un hombre "interesante".

Y dicho y hecho, Pippa se dedicó a asistir a conciertos, fiestas privadas, partidos de polo o tenis, a las carreras de caballos, cacerías...y consiguió hacerse un nombre propio en el panorama social británico.

No contenta con aparecer regularmente en revistas y tv, Pippa, decidió montar su propia empresa de eventos, Party Pieces, (una web muy interesante, pinchad para verla) dedicada a la organización de eventos de todo tipo.

Entre sus argucias para estar siempre perfecta, están el arreglarse con esmero, algo que le lleva no menos de dos horas, practicar deporte regularmente, comprar la mejor ropa y accesorios que puede permitirse, intentando vestir siempre de forma femenina, con faldas y vestidos.

Tiene fama de trepa y de ser capaz de todo por conseguir lo que quiere, pero también de ser una estupenda relaciones públicas, es una mujer muy sociable, culta, acostumbrada a tratar con la clase alta, con saber estar y elegancia.

Sin duda habrá que seguirle la pista.

(Información obtenida del Vanity Fair e internet.)